SABER PERDONAR

SABER PERDONAR

INTRODUCCIÓN: Cuándo en una relación tu pareja te "ofende" y no se lo dices, es cómo si fueras "guardando"los malos detalles en un "costalito"al más puro estilo de "Santa Claús", sólo que tú cargamento no es tan emocionante de llevar ¿verdad?

Tú cargamento de rencores y resentimientos lo cargas a tús espaldas...¡Eres tonto! y va a tú costal...

LLegaste tarde a la hora a la que tú citastes, estás que hierves cómo una olla express por dentro y te preguntas ¿qué se ha creído? y cuándo tú le preguntas "¿Estás enojado (a) mi amor?" y tú le respondes con un coraje mal disimulado: "no mí amor, no te preocupes..."

¡Es "otra más" a tú costal! y para no hacerte larga la historia, después de un ciento de "detallitos", tú pareja llega contigo y te dice en plan de broma: ¡Te has convertido en un León rugiente! Tú novio (a) sorprendido (a) y ofendido (a) te responde "¿Sólo por eso te molestas?" y le sacas toda la lista de navidad...Y tú creías que no te afectaba tolerar pequeñas cosas de tu pareja?

CONCLUSIÓN: La moraleja de esta historia: No te guardes nada. Dile a tu novio (a) lo que sientes y lo que no te gusta. Hazlo con tacto, pero con claridad. ¡Tira tú costal! Que no haya ningún lugar en el que tu guardes rencores. Siempre exprésale a tu pareja lo que sientes.

REFLEXIÓN: Al fin y al cabo un noviazgo se basa en una relación de armonía y comprensión mutuas. Y si tú amor no te escucha ni acepta lo que dices, no puede ser tu pareja duradera y es mejor que lo sepas a tiempo.